lunes, 2 de mayo de 2016

Reseña: The Magnates a Game of Power

Ficha Técnica

Diseñador: Jaro Andruszkiewicz, Waldek Gumienny
Ilustrador: Jarek Nocon, Piotr Slaby
Editor: Phalanx, MasQueOca
Año Publicación: 2014
Nº Jugadores: 2-5
Duración: 90 minutos
Dificultad: Media-Baja
Dependencia Lenguaje: Media-Baja
Categoría: Estrategia

Mecánica: Subasta, Mayorías


Valoración:


Descripción

Juego de estrategia que usa como trasfondo histórico las intrigas aristocráticas y luchas de poder de la Commonwealth Polaco-Lituana, desde su apogeo durante la Unión de Lublin hasta su caída con la desintegración del estado Polaco-Lituano y la formación de la Confederación de Targowica. Cada jugador asume el mando de una familia tratando de aumentar su poder e influencia.
Cada familia cuenta con trece miembros, cartas, con una influencia y poder en conflictos que va de 2 a 14, a excepción del miembro con una influencia de 10 que tiene un poder en conflictos de solamente 1, para afrontar cada uno de los cuatro periodos en los que se desarrolla el juego.
En el primer periodo se sortea el orden de turno, en el resto de periodos el orden se determina por el número de dominios establecidos por jugador en cada una de las cinco provincias y cuatro feudos del territorio.
Cada periodo comienza con el nombramiento de un nuevo rey. A continuación se subastan los cuatro poderes del senado. Por orden de turno cada jugador realiza tres pujas secretas, tres cartas, sobre los cuatro cargos disponibles.
El primer cargo, el primado, da el derecho de resolver los empates en pujas y conflictos. En caso de empate en la subasta de este cargo se decide por orden de turno inverso.
Los otros tres cargos en pugna conceden tres puntos de poder adicionales en un conflicto a tu familia, tres puntos adicionales de influencia en una puja de cartas de privilegios y la posibilidad de intercambiar un dominio de otra familia por uno propio en la última fase del periodo.


Además del cargo, el vencedor de cada subasta podrá colocar dominios en algunas de las cinco provincias disponibles.
En  la siguiente fase se subastan cinco cartas de diferentes privilegios. A diferencia de los cargos, que sólo sirven para el periodo en juego, estos privilegios pueden utilizarse normalmente en cualquier periodo del juego. Cada jugador puja por cada una de las cartas en subasta con cinco de sus parientes. De nuevo, además del privilegio correspondiente el vencedor de cada subasta obtiene el derecho a colocar dominios en alguna provincia.
En la fase de conflicto se colocan amenazas hasta llegar a cinco. Cada familia coloca a los cinco parientes restantes en cada una de las amenazas. Cada conflicto exige una suma de poder determinada para superarse.
En caso de victoria, el jugador que mayor aportación de poder en conflictos ha realizado gana la recompensa indicada en la carta de amenaza, normalmente el derecho a colocar dominios en provincias o feudos.
En caso de derrota, cada jugador deberá eliminar un dominio de las provincias que indique la carta de amenaza y el jugador con menor aportación de poder en el conflicto deberá retirar un dominio adicional de la provincia amenazada. Además, algunas amenazas conllevan penalizaciones adicionales.
Cada conflicto no resuelto particiona la provincia amenazada, limitando la posibilidad de colocar nuevos dominios en ella. Si al final de un periodo hay treo o más provincias particionadas todos los jugadores pierden el juego.
Por último, se proclama la muerte del rey en cada periodo, pudiéndose realizar algunas acciones adicionales en esta fase por cartas de privilegios o por cargo del senado.

La familia ganadora será la que más puntos obtenga al final del cuarto periodo. Los puntos se obtienen por dominios establecidos, por mayorías absolutas o relativas en provincias, por feudos y por cartas de privilegios.



Opinión

Duración adecuada y alta intensidad. Rivalidad e interacción desde el inicio hasta el final entre todos los jugadores. Reglas sencillas y asequibles alcanzando una gran profundidad estratégica. Sin embargo, puede provocar sensación de desenganche en algunos jugadores y esto favorecer que se cumplan las condiciones de partida pérdida.
Producción acertada con un mapa muy atractivo y componentes de calidad. “Set up” sencillo y fácil de explicar. Jugadores con diferente experiencia de juego resulta un hándicap difícil de superar por aquellos más inexpertos.
Buena experiencia de juego con fluidez, interacción y emoción adecuadas, aunque tras varias partidas se observa que las sensaciones son muy diferentes entre jugadores y que algún contrincante no termine de entrar en la dinámica del juego perjudica la experiencia conjunta.

Personalmente, es un juego al que estoy dispuesto a jugar de vez en cuando. Para mi destaca por la necesidad de interpretar las estrategias del resto de jugadores en las subastas y resolución de conflictos, haciéndolo muy atractivo y dinámico en función de los oponentes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario